Muere uno de los siete cachorros tirados en el basurero de Coachella.

Uno de los siete cachorros tirados en un contenedor de Coachella la semana pasada murió.

“Desafortunadamente, nos enteramos de que uno de los cachorros abandonados ha muerto. Una de las voluntarias de control de animales se comunicó con nosotros y nos contó las malas noticias. Además dijo “Que el pequeño cachorro podría haber estado en el fondo de la bolsa cuando la mujer tiró a los cachorros a un contenedor de basura y, posiblemente, nunca se recuperó de ese momento traumático”.

El lunes, el jefe de los Servicios para Animales del condado de Riverside, Chris Mayer, arrestó a Deborah Sue Culwell, de 54 años. Ella enfrenta siete cargos por delitos graves de crueldad animal y siete cargos menores por abandono de animales.

Según Servicios para Animales, los otros seis cachorros se están recuperando.

Los 38 perros que se encuentran en la casa de Culwell todavía están incautados y están siendo atendidos por el equipo veterinario y los tecnicos de cuidado de animales en el Campus de Animales de Coachella Valley en Thousand Palms. Los 38 perros han sido examinados y no tienen enfermedades graves.

A Culwell actualmente se le está cobrando $ 570 en tarifas de pensión y cuidado por cada día que los 38 perros permanezcan bajo la custodia de los Servicios para Animales.

“El comandante Chris Mayer intentó ponerse en contacto con el dueño de los 38 perros el miercoles por la tarde. Ella no estaba en casa. Un miembro de la familia le dijo al comandante Mayer que no hablaría con el”, continuó el comunicado de prensa de Servicios para Animales. “Estas tarifas diarias no incluyen el costo de las vacunas, las tarifas de exámenes, los medicamentos ni las tarifas exigidas por el estado. En resumen, sigue siendo la propietaria legal de los 38 perros hasta que renuncie a la propiedad”.

Despues de esos 10 días, los Servicios para Animales pueden coordinar legalmente la disposición de los perros mediante la adopción o transferirlos a un socio sin fines de lucro en la red de organizaciones de Servicios para Animales.

Los siete cachorros fueron rescatados originalmente el jueves por la tarde por un buen samaritano que pasaba por el contenedor de basura, que se encuentra detrás de la tienda de repuestos de automóviles Coachella NAPA. El transeúnte trajo la bolsa al frente de la tienda y luego un empleado de NAPA se contactó con Servicios para Animales.

“Si no fuera por las acciones del buen samaritano, es posible que los cachorros no hayan sobrevivido por mucho tiempo”, dijeron los Servicios para Animales del Condado de Riverside en un comunicado. “Las temperaturas del mediodía en Coachella el jueves estuvieron en el rango de mediados de los 90”.