“Nunca volveré a llamarlo papá”: La hija de Gisèle Pelicot dice que sospecha que también fue drogada y abusada sexualmente

Por Sophie Tanno, CNN en Español

Caroline Darian, la hija de Gisèle Pelicot, quien sufrió años de horribles abusos sexuales por parte de su entonces marido y otros hombres, ha dicho que está segura de que su padre la drogó y sospecha firmemente que ella también fue violada.

En una amplia entrevista concedida a la BBC, Darian, de 46 años, describió la “carga” mental que supone ser hija a la vez de la víctima y del agresor, y expresó su firme deseo de que su padre muera en prisión.

El mes pasado concluyó un espeluznante juicio por violación masiva y suministro de drogas que duró un mes y sacudió a Francia hasta sus cimientos, con 51 veredictos de culpabilidad. Dominique Pelicot y otras 49 personas fueron declaradas culpables de violación o agresión sexual a su exesposa, mientras que uno de los procesados fue condenado por intento de violación con agravantes de su propia esposa, en lugar de Gisèle, al haber copiado los métodos de Pelicot.

El juicio —que ha empujado al país a examinar una cultura de misoginia generalizada y agresiones sexuales sistémicas— ha impulsado a las mujeres a exigir cambios en la forma de abordar la violencia de género.

Darian describió cómo recibió una fatídica llamada telefónica de su madre, una noche de noviembre de 2020, en la que Gisèle le informaba que su padre, ahora de 72 años, la había drogado durante unos 10 años para facilitar su violación por parte de diferentes hombres.

“En ese momento perdí la posibilidad de tener una vida normal”, declaró Darian a la emisora.

Darian habló de cómo sospecha firmemente que ella también fue víctima de abusos sexuales orquestados por su padre. Días después de la llamada, la policía la llamó y le mostró imágenes encontradas en el ordenador portátil de Dominique en las que aparecía inconsciente en una cama vestida sólo con una camiseta y ropa interior, aunque al principio no se reconoció.

Dijo a la BBC que sabe que su padre la drogó y supone que también fue violada. “Pero no tengo pruebas”, lamenta.

“¿Y ese es el caso de cuántas víctimas? No se les cree porque no hay pruebas. No se las escucha, no se las apoya”.

Ante el tribunal, Dominique mantuvo que no había abusado de su hija. Ese mismo día, Darian le gritó: “¡Nunca volveré a verte! Morirás solo como un perro”, según reportes de la prensa.

Ahora, describe a su padre como “uno de los peores depredadores sexuales de los últimos 20 o 30 años” y ha escrito un libro en el que detalla el trauma de su familia, titulado “Nunca volveré a llamarlo papá”.

Describe la realidad a la que se enfrenta como una “carga terrible” y ahora sólo puede ver a Dominique como el “criminal sexual que es”.

El libro también explora el concepto de “sumisión química”: el uso de drogas para facilitar la acción criminal contra una persona, incluido el abuso sexual. Fue el método que Dominique utilizó para orquestar el abuso de su esposa, ofreciendo su cuerpo inconsciente a desconocidos por Internet.

En diciembre, Dominique recibió la pena máxima de 20 años por violación con agravantes. Otros 48 hombres juzgados fueron declarados culpables de violación con agravantes, y dos de agresión sexual.

Las pruebas muestran cómo Dominique reclutó durante años a los hombres para violar a su entonces esposa en el “sitio de citas” Coco.fr, ya desaparecido, utilizando la sala de chat denominada “sin que ella lo supiera”, donde intercambiaba fotos de una Gisèle inconsciente antes de pasar a Skype y mensajes de texto para concertar el encuentro con sus cómplices.

Gisèle declaró que desconocía por completo las acciones de su marido. Con el tiempo, las frecuentes sedaciones y los abusos sexuales empezaron a pasarle factura física. Su marido la acompañó a varias visitas al médico en las que se quejó de pérdida de memoria y dolor pélvico, según documentos judiciales.

Su red de delitos no salió a la luz hasta que Dominique fue detenido en un supermercado local en septiembre de 2020 por grabar bajo las faldas de clientas, delito por el que fue condenado. Pelicot fue condenado a ocho meses de prisión en suspenso por este delito.

Mientras investigaban el caso, los agentes de policía confiscaron su disco duro, su computadora portátil y sus teléfonos, y encontraron cientos de imágenes y videos de Gisèle siendo violada, abriendo uno de los peores casos de delitos sexuales en la historia moderna de Francia.

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Saskya Vandoorne, Kara Fox y Niamh Kennedy de CNN han contribuido a este reportaje.