Restaurante cobra un extra de US$ 120 por ponerle piña a la pizza
Por Maureen O’Hare, CNN
Hubo pocos momentos tan controvertidos en la historia de la comida como cuando un chef canadiense decidió en la década del 60 poner piña enlatada encima de una pizza de jamón.
Cuando Sam Panapoulos creó lo que él y su hermano/cómplice llamaron pizza hawaiana, cometieron una violación del protocolo culinario italiano que se repetiría a lo largo de los años.
Unas seis décadas después, la cuestión de si la piña y la pizza van juntas es un tema que todavía divide naciones, comunidades e incluso familias.
Ahora, una pizzería en Norwich, Inglaterra, continuó con la polémica al introducir la piña en su menú de entrega en línea, pero por la nada modesta suma suma de 100 libras (unos US$ 122).
Sorprendentemente, este no es el precio más alto cobrado por la piña en el último año (una variante de color rojo de US$ 395,99 llegó al mercado de California en mayo pasado), pero es considerablemente más caro que el dólar que normalmente costaría una lata de piña enlatada en un supermercado de Reino Unido.
“Sí, por 100 libras puedes tenerla. ¡Pide el champán también! ¡Vamos, Monster!”, se burla el nuevo listado del menú de Hawaiian en la cuenta de Lupa Pizza en la aplicación de entrega de comida del Reino Unido Deliveroo.
La pizza con piña se encuentra junto a clásicos no controvertidos como la Napoli, Meatball y Pepperoni, todos ellos a la venta por US$ 17 o menos.
“Digo ‘no’ a la piña”, dice el chef principal de Lupa, Quin Jianoran, a CNN Travel por teléfono.
Los hermanos Panapoulous mezclaron “sabores agridulces chinos con un producto italiano tradicional”, explica. “Es muy controvertido, porque hay gente a la que literalmente le encanta y hay gente que lo odia. Nosotros estamos tomando una postura”.
Hasta el momento no ha habido pedidos de la pizza de 100 libras, confirmó el chef principal de Lupa, Quin Jianoran, a CNN Travel, aunque la reacción en línea ha sido grande. “Es increíble, para ser honesto”, dijo.
El restaurante prometió poner la pizza con piña en su cartel especial del mes si los resultados de una encuesta en el Norwich Evening News, un periódico local, resultan a favor de la fruta.
La variedad actualmente lleva la delantera con un 62% de los votos a favor de que la piña esté encima de la pizza, aunque todavía queda por decidir si el precio de 100 libras se trasladará al plato que se ofrece en el restaurante físico.
“¡Mi opinión podría cambiar!”, ríe Jianoran. “Podrían ser 200 libras, podrían ser 2 libras, quién sabe”.
Aunque los pizzeros italianos tradicionalmente han rechazado la piña, hace un año el maestro de la pizza napolitana Gino Sorbillo introdujo una pizza de piña que generó controversia en su menú en Via dei Tribunali, la calle de pizzas más conocida de Nápoles, la capital mundial de la pizza. Su intención, dijo, era “combatir los prejuicios”.
El debate sobre la pizza de piña en ocaciones se ha vuelto tan acalorado que casi desencadenó una crisis política. En 2017, el entonces presidente de Islandia, Guðni Th. Jóhannesson, tuvo que aclarar que no prohibiría la pizza de piña en su país (y que ni siquiera tenía el poder de legislar sobre una medida semejante) después de que su desdén por la combinación se volviera viral.
Si bien Jianoran prefiere los ingredientes tradicionales, y su “estilo favorito de pizza es una pizza estilo Nueva York,no hay límites para lo que cada uno le pone a la suya”.
Una pizzería de Nueva York fue elegida como la mejor del mundo en 2024. Y una Pizza Napoletana, en el Lower East Side de Manhattan, encabezó los premios 50 Top Pizza Awards, con sede en Italia, el pasado mes de septiembre.
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